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« en: 16 Junio, 2010, 08:56 am »
La pregunta tiene mucho más sentido del que aparenta, y lo tiene porque el axioma que dice "el uno es el primero" sólo es cierto si está referido a los números naturales, a los números del conjunto \( \mathbb{N} \). Para verlo, tomemos otro conjunto, el conjunto de los números enteros, \( \mathbb{Z} \), que es igual que el otro pero incluyendo, además de los anteriores, los enteros negativos. Ahora la afirmación no es cierta, el \( 1 \) ya no es el primero. Quién es el primero ahora.
Si entendemos la pregunta como cualquiera la entendería (cualquiera que no fuera un político) el primero es el que está más a la izquierda según escribimos la sucesión. Y resulta que hacia ese lado encontramos, como vistos en un espejo, todos los elementos que hay a la derecha, pero con una rayita delante: \( -1,-2-3,...-n \). El primero, en negativo, es tan grande como queramos, o sea, siempre se puede encontrar uno "más menor". Ocurre lo mismo análogamente que con el último por la derecha; que siempre puede ser "más mayor".
El axioma no funciona en \( \mathbb{Z} \), es falso; eso sí, es tan falso que tal falsedad no necesita demostración (algo es algo).
Se dice que un axioma es una afirmación que no necesita ser demostrada; a mí me gusta decir que sí lo necesita, pero que no somos capaces de hacerlo (mas quisiéramos poder hacerlo; y también se podría exclamar, con un "más" no adversativo, ¡más quisiéramos!)
Es complicado o prácticamente imposible encontrar un axioma que funcione respecto de todas las propiedades matemáticas involucradas en los distintos conjuntos numéricos; visto el ejemplo anterior cualquiera puede imaginar otros casos. Aún nos daremos más cuenta de esto si no sólo pensamos en números pelados y mondados: escalares, valores asociados a una sola coordenada, para entendernos. La cosa se complica si usamos un elemento como éste:
\( (1,-3,5) \)
Si nos referimos al primer cuadrante del sistema de coordenadas, sí podemos decir que ese 1 es el primero a partir del origen... pero es sólo un componente del elemento, una parte de él, y, por ende, hay más cuadrantes.
¿Cómo podríamos encontrar el primer número de todos, el primero de verdad? No se puede, y ahora veremos por qué.
Sin meternos en números complejos, busquemos el primer número real por la izquierda; pasa algo parecido a lo que ocurría antes, siempre hay uno menor que el anterior, lo mismo que siempre hay uno más grande por la derecha.
No obstante, ¿por qué no decir que el 1 es ese primer número real, ése tan pequeño?
El primer problema que encontramos, el más obvio, es que, al no estar definido, no nos va a servir bien de elemento neutro; el uno es neutro porque cuando multiplicamos o dividimos por él, el número sobre el que actúa se queda igual que estaba:
\( 1a=a \)
Claro, las complicaciones que van a surgir si asignamos por decreto esta propiedad al cero, o casi cero, van a ser demasiadas (se nos quedaría todo en nada, imaginaos las cuentas de los bancos, encima de la crisis que hay).
Bien, aun así, podríamos intentar hacerlo por convención. Ya está el "casi cero" es el primero. Qué bien, ya no vamos a necesitar números racionales, ni reales...
Así que al casi cero lo designamos con este símbolo 1, al siguiente con 2...
Y ¿qué va a pasar? Va a pasar que va a haber números que no van a ser múltiplos de ninguno de los números anteriores, o sea, no van a ser múltiplos de ningún número menor que ellos; salvo del primero, por la mencionada propiedad de neutralidad que le hemos otorgado para hacer este experimento. Esos números serán, serían, los primos; y habría primos que tenderían a cero, según este invento.
Siendo así, cuando fuéramos a dividir, a partir en partes iguales, los mencionados números por otra cantidad... nos aparecerían siempre, en todos los casos, los números \( \mathbb{Q} \) , los racionales.
Ellos son los principales responsables de que aparezcan los números no enteros, ellos, los de siempre, los números primos. Los primos se presentan tarde o temprano (más bien tarde y temprano) aparecen en algún lugar de la sucesión por primera vez (por eso se llaman primos) y cada uno de ellos, particularmente, no vuelve a aparecer nunca más.
En fin, y por esto el uno, nuestro uno, no puede ser realmente (\( \mathbb{R} \)ealmente) el primero.